Dionisio Scarpin, intendente de la localidad de Avellaneda (Santa Fe) donde se encuentra la sede de Vicentin contó las angustias que vive la población tras el anuncio del presidente Alberto Fernández de mandar al Congreso el proyecto de expropiación de la empresa. "Es una empresa familiar, que ya lleva la tercera generación al frente de una firma muy importante para la región. Lo que hay que definir es si la intervención puede actuar en el marco del concurso de acreedores", agregó.
El intendente consideró que los "del interior de la Argentina son pueblos pacíficos, lo de ayer fue una expresión de bronca y no creo que se repita. No fue en contra del gobierno nacional, fue a favor de lo que nosotros pensamos y creemos y fomentando el diálogo. Esto es más política que economía porque no creo que haga falta una expropiación".