Guillermo es uno de los entrenadores de la selección nacional de handball y el actual de Boca Juniors. Desde la llegada de la nueva dirigencia él junto a su equipo de trabajo presentaron un proyecto para que el club compita en este deporte. “Gracias a que se adquirió la licencia del Colegio de Guadalupe nos pusieron en tercera. Sino eran mínimo 8 años para llegar a la máxima categoría. Siento que lo vamos a lograr porque tenemos el apoyo del club.”
El handball comenzó en Febrero, pero un mes después se dispusieron las medidas de aislamiento “Jugamos un solo partido contra San Telmo y luego se terminó todo por el Coronavirus. No pudimos jugar de local todavía. Estamos esperando ver el estadio lleno con todos los hinchas de Boca. Sería un sueño.”
En medio de la crisis por el COVID-19 los planteles buscan diferentes formas para desarrollar sus actividades “Nosotros nunca dejamos de entrenar. Empezamos a escuchar más al jugador sobre lo que quería. Agregamos charlas con otros jugadores para levantar el nivel motivacional. Usamos variables y variantes para que los chicos se sigan motivando.”
Además Guillermo expresó qué siente en este nuevo desafío “Soy hincha de Boca y voy a la cancha desde que nací. Imagínate lo que siento por manejar el Handball por primera vez en la historia de Boca.”
Por último remarcó los objetivos para el handball en los próximos años “Tenemos la intención de progresar y crecer. Tenemos todos la pasión por Boca y por algo que nos gusta. Estamos muy agradecidos con la institución”