El periodista Jorge Sigal formó parte del Partido Comunista a fines de los ’60. Su familia pertenecía a su ideología y cuando dejó de formar parte, aseguró que fue “segregado”. “Lo viví con mucha desolación”, declaró.
“Estar incorporado era pertenecer a una especie de élite, tenía algo de moda, de estar en un lugar de privilegio. Algunos lo aprovecharon y lo convirtieron en un gran negocio”, desarrolló el autor del libro “El día que maté a mi padre: Confesiones de un ex comunista”.
“Pertenecías al Partido Comunista y tenías todo el respaldo, pero debías ceder individualidad”, contó. Sigal también se formó doce meses en la Unión Soviética y sobre aquellos días recordó: “El 1 de mayo hacían un desfile militar, mostraban la opulencia del socialismo”.
“Me parece importante volver sobre los pasos de uno porque ahí están los del futuro. Si mi experiencia puede ayudar a otros que tienen que desprenderse del fanatismo, es parte de mi compromiso con la libertad”, concluyó el periodista.