Colombia atraviesa su séptima jornada de protestas, iniciadas el 28 de abril por el movimiento Paro Nacional, en rechazo al proyecto de reforma tributaria que presentó el presidente Iván Duque al Congreso y fue retirado el domingo para consensuar otra “Ley de Solidaridad Sostenible” con partidos y movimientos, según anunció en un mensaje al país.
El conflicto tuvo repercusiones en el gabinete, ya que renunció el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, quien insistió en calificar a la reforma del sistema impositivo como "un imperativo". En su reemplazo fue designado el ministro de Comercio y exrector de la Universidad del Rosario, José Manuel Restrepo.
La iniciativa ahora vuelta atrás incluía un aumento de los impuestos sobre la renta y productos básicos.
La Defensoría del Pueblo informó que el saldo que dejaron en cinco días los enfrentamientos fue de 17 civiles y un policía muertos y 846 heridos, incluidos 306 civiles.
No conformes con la decisión presidencial que buscaban, los organizadores insistieron este lunes con más marchas y bloqueos del tránsito en Medellín, Bucaramanga, Barranquilla, Ibagué y otras ciudades, fundamentándolos ahora en la gestión oficial de la pandemia y abusos policiales.
Aprovechando el éxito que tuvo la convocatoria y envalentonado por la decisión de Duque, el movimiento nacido el 21 de noviembre de 2019 continuó arengando a los ciudadanos desde las redes sociales para que salieran a las calles a marchar en contra de la reforma a la salud, el abuso policial, el asesinato de líderes sociales, entre otras cosas.
“El pueblo está aguantando hambre, ¿quién pondría una reforma tributaria? Vino a destiempo en un país donde los ricos quieren ser más ricos”, declaró el periodista colombiano Gabriel Chemas y agregó: “No es fácil de controlar la situación”.
Fuente: Noticias Argentinas