Manuel Etchevehere, sobrino y ahijado de Dolores, aseguró que “tenemos mucha certidumbre de que estamos del lado de la ley”, y agregó: “Sabemos que nuestro reclamo es válido y cierto”. De todas maneras, confesó que “esto pasó a ser una cuestión política nacional”.
Con respecto a su madrina Dolores, Manuel relató que “cuando quedó en la calle, le prestamos un departamento en Recoleta y nunca lo devolvió”, y contó una situación extrema que le tocó vivir: “Cuando vivíamos en Recolera, Dolores me gritaba puto y trolo. Una vez me tuve que encerrar durante cinco horas en la azotea del edificio porque me corrió junto a su hijo. Siempre fue violenta”.
Por último, se refirió a Juan Grabois: “Estoy convencido de que busca dar un paso en un plan que es normalizar la toma de tierras”.