Ariel Amoroso, presidente de AHRCC, explicó que "hay una limitación para la gastronomía. Si el cierre comenzaba a las 11 de la noche el impacto hubiese sido fuertísimo", y sostuvo que "la limitación es un poco más suave de lo que se esperaba, pero le pega de lleno a los bares y restaurantes".
Por otra parte, se lamentó porque "la hotelería hace meses está cerrada en CABA. Esas restricciones no le afectan demasiado porque peor no pueden estar", y añadió: "La gastronomía y la hotelería pudieron sostenerse gracias a la implementación del plan ATP a nivel nacional".