A horas del día del bandoneón, en homenaje al nacimiento de Aníbal Troilo, Rodolfo Mederos reveló que para él “no hay un día del bandoneón, son todos los días, es como decir un día del amigo, todo eso no es cierto, uno vive todos los días con eso o no vive con eso.”
El prestigioso bandoneonista explicó que su relación con el bandoneón es como una relación de amistad, “a tus amigos no los ves cada día en cada momento pero sabes que están. Él es una especie de consejero”.
Rodolfo Mederos confesó cómo comenzó su pasión por la música y por el bandoneón, “yo siempre digo que esas cosas ocurren antes de nacer, me da la sensación que cuando estaba en la panza de mi vieja y ella escuchaba la radio y escuchaba aquellas orquestas típicas, yo ya empezaba a escuchar algo.”
“Son esas cosas que están como en la esencia de uno”, continuó el ícono del tango, “uno no tropieza con eso un día y lo descubre, es mi propio hogar, como la sopa que hacía mi vieja, como el mate cocido que tomaba antes de ir a la escuela con los sabañones en las orejas y pisando la escarcha, como cuando mi perro movía la cola, soy yo mismo, no sé cómo explicarlo.”
Escucha la entrevista completa a Rodolfo Mederos.
