“Esta es la peor crisis de todas las que pasamos desde que empezamos a producir”, define sin ningún tipo de duda Tomas Lorda, uno de los socios de Energía Renovable SA (Enresa), una planta pyme de biodiesel instalada en la ciudad pampeana de Catriló. Fue la primera empresa de este tipo en la provincia de La Pampa y comenzó a elaborar en 2011 el renovable necesario para cortar el gasoil y hacerlo algo más amigable para el medio ambiente. Desde que se sancionó la Ley de promoción de los Biocombustibles en 2006, ese combustible fósil se enriquece con 10% de biodiésel.
Germán Paats, el nuevo presidente de la Fundacion Barbechando, entidad que se dedica a seguir y analizar lo que sucede con el tratamiento legislativo de los temas que importan al sector agropecuario, asumió ese puesto en el peor momento: en el Congreso hay muchos proyectos de ley en danza que tienen implicancias para el agro. Y la mayoría de ellos, en forma de amenaza.