Teresita Flores tiene 83 años de edad y nació en Sanagasta, en la provincia de La Rioja, un pueblo originario, prehispánico, que se resistió a los españoles y al que luego los jesuitas llevaron negros esclavos para las colonias, me señala ella con su espíritu crítico. Es curioso ver hoy a muchos de sus pobladores con rasgos negros. Se debate su etimología entre “pueblo de negros”, “de ollas” o “de brujas”.