Allí fue al jardín de infantes. Su padre era paratécnico de SENASA, inspector de sarna ovina. Sus abuelos paternos, inmigrantes españoles de la región de Asturias, fundaron una estancia de ocho mil hectáreas, que llamaron “Las Negras”, porque hallaron allí vacas negras matreras. Queda a 300 kilómetros al suroeste de Puerto Deseado, en la región del Bosque Petrificado.
En el año 1980 su familia se mudó a vivir a Puerto Deseado, sobre el mar Atlántico, pero pasaba sus vacaciones y algunos fines de semana en Las Negras, donde vivía su tío Mito, del cual aprendió desde “sancochar” o amansar un potro, a armar trampas para los zorros colorados que les comían los corderos, a castrar un yeguarizo, hasta a “medir las palabras para no estropear el silencio rural”.